jueves, 9 de febrero de 2012

La adolescencia, para ella, una parada a medio camino.
A veces, quería abrazarse a su osito de peluche y no necesitar nada más, otras veces, quería calzarse unos buenos tacones y salir a comerse el mundo, pero nunca, nunca, sabía cual de las dos elegir.



Nunca se puede cometer el mismo error dos veces, la segunda vez no es un error, es una elección. ;)

lunes, 19 de diciembre de 2011

¡Hola chic@s!

Bueno hoy no toca otra de mis entradas sentimentalistas. Hoy me gustaría hablaros de tres grandes estrellas de mi pueblo, que si el Destino quiere, llegarán a ser grandes leyendas del rock.
Y esque estos tres chicos tienen mérito y por ello me gustaría que visitárais sus vídeos de Youtube de su primer concierto, os aseguro que no os arrepepentiréis.

 http://www.youtube.com/watch?v=XVoP9Ie_ZNs

http://www.youtube.com/watch?v=tiuApbsjR34

Por favor solo os pido un pequeño empujoncito para estos talentosos chicos, pues a todos nos gustaría que nos ayudaran a cumplir nuestros sueños. ¡Difundidlo! :)








domingo, 11 de diciembre de 2011

Cada fracaso nos enseña algo que necesitábamos aprender de alguna forma.

Sí, pequeña, lo sé, se que duele y mucho, pero tú no sientas miedo, al menos intentalo, como hago yo. Se que será difícil atravesar este camino, como también se que cada día duelen más y más los puñales que en tu pecho se clavan.
No patalees, pues estas arenas movedizas que llamamos "vida" te arrastrarán más todavía, simplemente espera quieta e indiferente a que pase, y aunque duela cada día más no desistas.
No dejes que las burlas u ofensas te dañen, al menos no dejes ver que te duele, pues tanto tú como yo sabemos que has cometido errores, pero has de ir con la cabeza bien alta, afirmandote a ti misma: "he cambiado y a la única persona que debía demostrarselo lo haré, tanto como me lo he demostrado a mi misma."
No dejes que sus palabras te deterioren, pues solo buscan renacer lo más oscuro que hay en ti, lo que dejaste enterrado hace ya algún tiempo, pero tu sigue aparentando ser feliz y luchando día a día por lo que más quieres, porque al final solo te quedará eso y la satisfación de haber podido callar muchas bocas. Lenguas afiladas como cuchillas que con apenas un susurro te hirieron, pero tú sacaste un arma pesada: la indiferencia, puesto quien sabe de lo que habla no encuentra motivos para levantar la voz, y ése es tu ejemplo, no levantaste la voz porque sabías perfectamente la situación y resististe como pudiste, asique no lo hagas ahora, porque desperdiciarías aquello por lo que tanto has luchado, aquello que te hace seguir respirando cada día. No dejes de lado tus metas, piensa que, dentro de poco, al fin dejarás esta cloaca llena de ratas infectadas de veneno, rabia y malas palabras, las olvidarás y entonces, puede, que tu sueño se cumpla, puede que seas feliz como quieres y con quien quieres y que, al fin, merezca la pena esperar y aguantar, nunca derrames delante de nadie una lágrima, porque el gesto más mínimo, sincero o débil podrían utilizarlo en tu contra de nuevo, sin preguntar nisiquiera un por qué, alegando que "no les importa tu vida" y luego dejándose ellos mismos por mentirosos al meter su sucio ocico donde no les llaman. Mientras tanto, sigue confiando en quien te da fuerza, en quien siempre te demostró que le importas y apesar de todo nunca te falló, quien te quiere de verdad. Y una vez más, querido yo, estas son las cosas que te demuestran cómo es en realidad esta sociedad.


martes, 8 de noviembre de 2011

La música

Dicen que los ojos es el espejo del alma, pero discrepo ante tal idea, en mi opinión es la música el espejo del alma, unos ojos tristes pueden reflejar la tristeza de años atrás, mientras que la música refleja la tristeza o alegría del momento, y a quien no le guste la música es que no tiene alma, ya puede gustarle el rock, la ópera o el reggae, pero escuche lo que escuche será un reflejo de su alma.
La música nos hace libres, nos hace soñar y nos da lecciones en algunas ocasiones, nos da quebraderos de cabeza, si, pero también nos une a unos y otros, compartiendo un mismo sentimiento durante algunos minutos, uniendo las almas de aquel que no solo la escucha, sino que también la vive y la siente muy fuerte en su piel y en su interior, haciendo que se nos ponga la piel de gallina.
¿A quién no le ha pasado alguna vez?

Ir por la calle con los auriculares puestos, empieza a sonar tu canción favorita y de golpe y porrazo te crees una super estrella, te viene el viento de cara elevando tus cabellos como si se tratara de un videoclip, la música rebota en tus oídos, acelera tu pulso y te hace sentir cosas imposibles de reemplazar, crees que puedes comerte el mundo en tres minutos y por un momento, solo por un momento, si te toca la fibra más sensible, incluso puedes llegar a pensar que puedes volar, pero no volar con alas, sino dejar volar tus pensamientos más allá de tus problemas y de un mundo que con el paso del tiempo se está degradando, puedes volar y compartir ese cielo privado con quien tú decidas y solo al escuchar la última nota de esa canción es cuando aterrizas. Puedes quedarte con un buen sabor de boca, o seguir con ganas de más, siempre está la opción de volver a revivir ese momento asique solo tú decides, volver a volar o quedarte con esa satisfacción que solo consigue dejarte la música, pero eso si, recuerda que lo bueno, si breve, dos veces bueno.




lunes, 31 de octubre de 2011

Rutina

Suena la alarma, cansada mira la hora, sólo son las 7:45, -cinco minutos más...- piensa, repasando tristemente lo que le queda por pasar ese día.Vuelve a abrir los ojos, ¡mierda! las 8:05, menos mal que sólo quería dormir cinco minutos más... ya llega tarde a clase, en 20 minutos tiene que estar plantada en la puerta de lengua castellana y literatura, otro puto lunes a primera hora llegando tarde, la que le espera cuando entre por esa puerta...
Se viste en menos de cinco minutos, se mira en el espejo y no se encuentra, no se siente bien y feliz consigo misma, no desayuna, ya está de camino a clase, con un poco de suerte llegará con la hora justa, aprieta el paso, le viene bien ya que el frío a esas horas de la mañana es insoportable, ella es bastante friolera, ahora desearía estar liada en su mantita alejada de cualquier posible realidad.
Llega justo a tiempo a clase asique se libra del sermón de la profesora, pero aun así no se libra de su mal humor diario. Hace sus tareas mientras observa furtivamente aquel chico que no la deja rendir bien en clase, imaginándose como serían las cosas si se acercara a decirle algo, sabiendo como estaban las cosas... mejor no arriesgarse. Ella lo ignora diariamente, él la mira con ojos tristes pero aún así también la ignora. Miradas cargadas de sentido viajan de un lado a otro de la clase, sobrevolando las cabezas de los indiferentes compañeros de clase, llegando a un extremo de la clase para arrancarle una pequeña elevación en las comisuras de la boca de ella y un fugaz destello de felicidad en los ojos de él.
Llega la hora del recreo, ella baja sin ganas las escaleras, pensando que el recreo es la peor parte de la mañana. Llega al patio, saluda a sus "amigos", es decir, a las personas que se hacen llamar así por el simple echo de permanecer años cerca, a pesar de no demostrar merecer esa palabra la mitad de ellos...
Saca su sandwich de pavo o su yogurt, -¡malditos complejos!- piensa cada día, todo culpa de una sociedad en la que usar la talla 40 implica ser gorda, la curva de la felicidad no la hace precisamente feliz y sus esfuerzos por remediarlo a menudo se van al traste por comentarios que si supieran las repercusiones que tienen, muchas veces los callarían. Pasa el resto del recreo sola, sin hablar con nadie y sintiendose fuera de lugar, sintiendo que allí sobra, asique observa desde la distancia un poco más a aquel chico, el de la risa bonita, y se marcha a no sabe dónde, a la biblioteca, o a sentarse en las escaleras, deseando que toque el timbre para entrar en clase y así sentir que al menos pertenece a algún sitio. Llega la hora de irse a casa, al fin, pero algunos días esta opción no es la mejor, a veces desearía salir de clase para irse lejos, a cualquier lugar, menos a casa. Indignada decide ir a casa, no le queda otra opción. Llega de mala gana, entra por la puerta, deja su mochila en el suelo de la sala de estudio y ya empieza la contienda diaria; gritos, insultos y órdenes es lo único que se escucha en toda la casa. Come rápido y se va a dormir, a esperar a que pase y él se vaya...
Su móvil suena y la despierta con una sonrisa, es el chico de clase. Va hacia el ordenador y abre su messenger. Pasa las horas hablando feliz con el, por un momento algo de tranquilidad en todo el día, la paz que le transmite esa persona... no encuentra las palabras para definirlo exactamente, cómo la hace feliz con cualquier pequeño gesto, no quiere que ese momento pase nunca. Se despiden para volver a hablar más tarde, y ella decide ponerse a terminar sus deberes, después va hacia el baño de la planta de arriba y se da una larga y relajante ducha, en la que una vez más, se permite el lujo de pensar en el y recordar buenos momentos, los únicos momentos buenos que está teniendo ultimamente, sólo él hace que no se sienta sola ya, la hace sentirse bien pero siempre ha de ser paciente. Suena el móvil de nuevo, es él, vuelven a hablar durante horas y al final, tristes se despiden hasta el día siguiente. Ella procura evitar en la medida de lo posible a aquel que se hace llamar "padre", sólo trae problemas en su órbita gravitatoria, asique mejor asentir y callar, asentir y callar. Ya es tarde y se va a la cama, pero antes lee un rato, le gusta la sensación que le deja un buen libro antes de dormir, leer hace que se translade a otros mundos, épocas o vidas. Cierra el libro ya cansada, lo deja, cierra los ojos y se pone a pensar en todo, una vez más se pone triste asique decide volver a pensar en él para animarse, y sin darse cuenta se duerme... y así un día más de su vida ha pasado.

domingo, 23 de octubre de 2011

El mundo de los adultos.

Pasan los años sin darnos cuenta hasta que llega el momento en que ves que el tiempo pasa vertiginosamente y se te escapa entre suspiros.
Perdemos el tiempo en cosas que carecen de importancia, siendo unos niños no nos damos cuenta de las dificultades que se avecinan y a cada pequeño paso vamos subiendo un gran escalón de esta cruda escalera llamada "vida", perdiendo la inocencia que un día nos regalaron al nacer, viendo los golpes que cada vez crecen en proporción a lo fuertes que nos hacemos, respaldándonos en una sonrisa poco sincera con la que queremos decir "- no hay problemas, soy feliz al 100%", sabiendo que nos podemos mentir, pero nunca nos engañaremos.
Cada vez me da más miedo y cada vez quiero que se retrase más la hora en que pase al mundo de los adultos, dejar mis ilusiones infantiles atrás para preocuparme de verdad, dejar de soñar como antes en unicornios y princesas para empezar a soñar con soluciones a todos mis problemas...
Pasar a un mundo lleno de matices grises, no rosas ni azules, pocos colores vivos y pocas, pero luchadas, alegrías. Mientras tanto lucharé por retrasar ese momento en el que mi vida cambie y lucharé por los sueños que me quedan. Y esque cuanto más grande me hago más miedo me da entrar en el mundo de los adultos.

lunes, 3 de octubre de 2011

Canción...

Justo antes de sentir morir una estrella
se observa la imagen mas hermosa del universo
un tremendo crepúsculo ilumina por unos segundos
destruyendo así a un pobre sol moribundo
y sus mares de lava construyen su ultimo verso,
así es como lo cuentan las dulces leyendas.

Soledad como principio, sentir un nuevo inicio, sería fácil resbalar entre precipicios... y quieras o no quieras calleron las fronteras, mi vida es efímera si tú no estas en ella.
Abrazo la botella pero ella no comprende, letras anti-heridas ahora duelen como siempre, dime que se siente si yo ya no confío. Princesa de este cuento, cuenta los minutos, abrazo los recuerdos y entre sábanas me inundo, atribuyo cada letra a latidos en mi espalda, protejo los futuros que derriban mi mañana, si para malos tragos me secarán las lágrimas, intento sonreír y, chica, eso me anima. Aparto cada parte que me abre el corazón, un simple soldado de juguete en tu cajón y son mas de las tres y aquí me ves con la nostalgia, prefiero amanecer y aceptar que algo me falta. Sería fácil decirle al mundo lo que siento, sería fácil encontrar agua en el desierto, sería fácil recordar esas promesas, sería fácil darlo todo por tenerla a ella. Si me preguntas te seré sincero: hoy mi puntuación es 25 bajo 0.
Algo que no tienes no te duele si lo pierdes, sería fácil y me encuentro solo a un paso, noto que me empuja la fuerza de mi fracaso, pero me tiembla el cuerpo y no puedo moverme, solo queda recular y avergonzarse, no tomé una decisión cobarde por cobarde.
Sería fácil sonreír cada día, sería fácil estar junto a ti toda una vida, sería fácil, si... tan jodidamente fácil... que tiemblo solo de pensarlo.